Huitzilan de Serdán, Pue.- El proyecto del Movimiento Antorchista se ha materializado en la transformación del pueblo huitzilteco, donde, de un entorno de violencia y sin servicios de educación, se ha logrado un municipio en el que se goza y respira un ambiente de tranquilidad y desarrollo educativo.
Así lo señaló Martín Julio Pérez Hernández, ex dirigente del Movimiento Antorchista en Huitzilan, en el marco del tercer aniversario luctuoso del activista Eulogio Pasión Hernández. En dicho evento, también se recordó a otros antorchistas caídos: Máximo de la Cruz Rivera, Bartolomé Tadeo Arellano, Ignacio Gómez Cipriano, Francisco Luna gobierno, Ramírez Velázquez Gobierno, Juan Gómez Cruz y otros.
Con una celebración religiosa y, posteriormente, una procesión que arribó hasta el panteón municipal, donde se colocó una ofrenda floral, más de 200 antorchistas aplaudieron la labor de los activistas, ex presidentes municipales y líderes, que murieron en la lucha por mejorar las condiciones de vida del municipio serrano.
El también fundador del antorchismo en la zona dijo: “no nos olvidemos, no perdamos de nuestra mente, de nuestra memoria, la historia de lucha de sacrificio, de sangre perdida. Ahora, las cosas han cambiado, porque ahora no vivimos de la zozobra de infelicidad, porque ahora la tranquilidad, la paz y el progreso a veces nos endulzan la vida”.
Y es que, aseguró, son más de 108 los muertos por las injusticias ocurridas en el pasado (cuando la Unión Campesina Independiente azolaba la región); además de una veintena de mujeres violadas, más de 100 huérfanos y cientos de pobladores, a quienes les fueron arrebatadas sus tierras. Por eso, es importante seguir impulsando este proyecto, que si se logra acrecentar a escala nacional es porque hay la capacidad, voluntad y sabiduría para transformar al país.
En tanto, el actual dirigente de Antorcha en Huitzilan de Serdán, Alejandro Vázquez Nájera, recordó que la reciente lucha de la organización, librada durante ocho meses ininterrumpidos, afuera de Casa Aguayo, ha rendido frutos, pues se construirá el Hospital de Huitzilan de Serdán. “Compañeros, su sangre no ha sido en vano, hay frutos que van a gozar sus hijos”.
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